El Ministerio de Educación prevé que los estudiantes que se enfrenten a la reválida o Prueba General de Bachillerato (PGB) que sustituirá a la selectividad tengan que realizar una prueba oral para demostrar sus habilidades expresivas en un idioma extranjero. La promoción que en septiembre iniciará cuarto de ESO será la primera en tener que afrontar, en el 2006, la nueva prueba.

El decreto de desarrollo de la ley de calidad referido a la PGB, que fue remitido ayer a las comunidades autónomas, revela que el examen constará de dos partes independientes. La primera incluirá cuatro ejercicios en los habrá que analizar un texto histórico o filosófico y dos relatos literarios (uno en castellano y otros en catalán) y responder, de forma oral y por escrito, a las cuestiones de lengua extranjera que se planteen. La segunda versará sobre los materias de la modalidad de Bachillerato cursado (Artes, Ciencia y Tecnología o Humanidades y Ciencias Sociales).

CUATRO CONVOCATORIAS

Cada una de las dos partes de la PGB se dará por superada con un 5. Y la calificación global de la prueba se obtendrá al hacer promedio de los resultados de ambos paquetes de ejercicios. Si la media es inferior a 5, pero una de las partes se ha aprobado, el alumno no tendrá que volver a examinarse de ella si se presenta a la siguiente convocatoria que se convoque.

El proyecto recoge que cada estudiante disponga de cuatro convocatorias, dos por curso, que la PGB se realice fuera de los centros escolares, probablemente en dependencias universitarias, como se hace ahora con la selectividad, y que su superación dé derecho a obtener el título de Bachiller.

Ahora bien, la nota de la reválida no servirá para ordenar el acceso a la universidad y elegir carrera, sino que el ingreso vendrá determinado por los resultados conseguidos en los dos cursos del Bachillerato (un 60%) y la calificación obtenida en la reválida (un 40%). Está por ver si se exigirá un examen adicional para ingresar en carreras como Medicina o Arquitectura.

El ministerio que dirige Pilar del Castillo destacó ayer que, con la entrada en vigor de la reválida, España pasará a formar parte de la mayoría de países de la Unión Europea que disponen de una prueba similar.

LA ORGANIZACION

El proyecto, que se ha enviado a la Comisión General de Educación, donde están representadas las comunidades autónomas, para su debate, confía a las administraciones autonómicas la creación de comisiones que se ocupen de la conveniente organización de la PGB.