Juan Carlos estuvo el jueves en el coliseo balear, una plaza en la que la lidia empieza a las 22.30 horas, no vaya a ser que los toros se derritan por el calor. Como es preceptivo, los tres diestros del cartel, Francisco Rivera, Finito de Córdoba y El Juli, brindaron su primer toro al Monarca (en la foto, recogiendo el capote de El Juli).

En la plaza de toros de Palma también estaba Ana Obregón, que no torea, ni reina, pero va de princesa. A Ana le van mucho los toreros y hace unos años mantuvo un encuentro nocturno con Finito de Córdoba, entonces soltero, en un hotel de Palma. El jueves, mientras firmaba autógrafos a la llegada y salida del coso, Ana se dolía de su soledad.

La actriz está pidiendo un novio a gritos, pero los hombres que busca deben de ser sordos. Después de la corrida de toros, Anita se pasó dos horas en un hotel esperando a no se sabe quién. El supuesto le debió de dar calabazas, pues eran más de las tres de la madrugada cuando Ana optó por volver a su residencia.

Finito, que está ahora casado con Arantxa del Sol, estuvo en el punto de mira de Ana Obregón, como lo estuvo Rafi Camino, otro que tal.

Aunque en la corrida del pasado jueves, Finito de Córdoba realizó la mejor faena, la estrella fue Francisco Rivera, que ese mismo día aparecía en las portadas de las revistas rosa dándose abrazos con su mujer, Eugenia Martínez de Irujo. Está claro que el hijo de Paquirri y Carmina quiere volver al redil. Pero, en casa, su aún esposa se lo está pensando.

Ya se sabe que la cabra tira al monte y el torero... pues eso, que no tiene enmienda.