El cardenal Alfonso López Trujillo, presidente del Consejo Pontificio para la Familia del Vaticano, acusó al Gobierno español de "totalitario" por impedir que los funcionarios católicos apelen a la objeción de conciencia para negarse a efectuar bodas entre homosexuales.

"La objeción de conciencia se realiza sólo cuando un estado no es totalitario, y si uno practica la objeción y es echado del trabajo entonces nos encontramos ante el más crudo de los totalitarismos. La democracia respeta la libertad. No respetar este principio es grave y peligroso", aseguró López Trujillo.

El cardenal repitió su llamamiento a los cristianos para que recurran a la objeción de conciencia si tienen que realizar una boda gay. "La objeción de conciencia no es una invención de la Iglesia. El cristiano tiene que oponerse para hacer respetar su fe, así como los médicos se oponen al aborto --argumentó Trujillo--. Se trata de leyes profundamente dañinas, y por tanto se puede usar la objeción de conciencia".

También afirmó que las "parejas de hecho son el primer paso para destruir poco a poco la institución familiar". "Las parejas de hecho son una ficción jurídica. Estas uniones no prometen nada a los hijos ni a la pareja, no dan estabilidad, ni ante la sociedad, ni ante Dios", dijo

"Las uniones de hecho han sido presentadas como un progreso y en realidad es una retrocesión moral. El problema se ha agravado porque todas estas parejas se presentan como una alternativa al matrimonio", continuó el cardenal López Trujillo en una entrevista a la agencia vaticana de noticias.

FALSEAR LAS PALABRAS Añadió que en España "para aceptar matrimonios de personas del mismo sexo han tenido que cambiar falseando las definiciones de la palabra matrimonio". "Es la primera vez en la historia que un país hace algo de este tipo --dijo--. Cambiando la definición, se afirma que el matrimonio puede ser la unión de dos personas, pero no explica que tienen que ser de sexo diferente. Nos hacen creer que es un derecho y no un daño para la familia".

López Trujillo subrayó que en España, además de los cristianos, los judíos, los musulmanes y otros grupos religiosos "han protestado públicamente porque el auténtico matrimonio es un patrimonio común de la humanidad y de la religión".

Y alertó sobre la ley que permite las adopciones por parte de parejas gays: "Cuando los niños tengan el uso de la razón y crezcan, ¿cómo será la tragedia de presentarse ante otros niños y decir mis padres son dos hombres o dos mujeres?".