Sandra Carrasco dice que le da "miedo" que la sociedad olvide a las víctimas

Sandra Carrasco ha hecho esta afirmación durante el homenaje que los socialistas vascos han tributado este mediodía en Arrasate a Isaías Carrasco, asesinado cuando se dirigía a su trabajo el 7 de marzo de 2008 tiroteado por un terrorista.

Familiares y amigos de Carrasco, entre ellos sus hijos y su viuda, han tomado parte en el acto, que ha consistido en una ofrenda floral en la misma calle en la que fue asesinado.

Numerosos dirigentes del PSE-EE como Txarli Prieto, José Antonio Pastor, Jesús Eguiguren, Iñaki Arriola, Manuel Huertas y Miguel Buen se han trasladado a Arrasate para participar en este homenaje, al que ha acudido también el concejal de Bildu en Arrasate, José Antonio Barriocanal (EA).

Sandra Carrasco, quien ha leído una emotiva carta dirigida a su padre, ha pronunciado después un breve discurso en el que se ha congratulado de que "las cosas" hayan cambiado en Euskadi y de que "por fin ETA nos haya dejado en paz -ha dicho-", aunque ha subrayado que "no hay que olvidar que todavía no ha entregado las armas".

"Quiero pensar que ese día llegará más pronto que tarde", ha señalado la joven, al tiempo que ha expresado su temor a que "la sociedad olvide a las víctimas del terrorismo".

"Entiendo que el entorno de ETA proteja a los suyos, pero no que algunos que antes estaban con nosotros ahora parezca que están en el otro bando", ha denunciado Sandra Carrasco, quien ha querido dejar claro que ella respeta "todas las opiniones, pero no las comparte" en referencia a "todo lo que se está haciendo".

Ha deseado que todos los ciudadanos sean "capaces de convivir", pero también que "todos respeten el dolor y el sufrimiento de estos años y la memoria de víctimas" como su padre que, según ha recordado, murió entre sus brazos, los de su madre y los de su hermano pequeño que tan solo tenía entonces cuatro años.

"Os puedo asegurar que lo más duro que a una persona le puede pasar es ver cómo alguien a quien quieres se te va muriendo entre las manos y no puedes hacer nada", ha asegurado Carrasco, quien ha repasado algunas vivencias que compartió con su padre y ha lamentado "las muchas cosas y días" que les han quedado por vivir.

El secretario general del PSE-EE de Gipuzkoa, Iñaki Arriola, ha tomado después la palabra para decir que "la paz y la convivencia se van abriendo camino en Euskadi, pero que la sociedad vasca sigue esperando que aquellos que, cumpliendo con la Ley de Partidos, se han incorporado a las instituciones reconozcan el daño causado por ETA" y pidan su disolución sin ningún tipo de contrapartida.

"Nos están demostrando a diario que no tienen la más mínima intención de avanzar de verdad en este camino", ha denunciado Arriola, quien se ha referido además a la decisión del gobierno foral de Bildu en Gipuzkoa de colocar en la fachada del Palacio de la Diputación un cartel de apoyo a los presos de ETA.

Ha criticado que, "una vez más, los radicales abertzales arrimen el ascua a su sardina actuando única y exclusivamente en su propio beneficio, satisfaciendo sus propios intereses e ignorando a todos aquellos que no comulguen con su pensamiento".

En su opinión, mientras "no cambien esa actitud será muy difícil construir, desde unos cimientos sólidos, una sociedad sana, libre y en paz" como la que anhelaba Isaías Carrasco.