El Ministerio de Sanidad ha difundido un comunicado en el que destaca que la posible contaminación por polonio 210 en aviones de British Airways no parece que represente "ningún efecto sobre la salud" de las personas que hayan podido estar en contacto con esta sustancia, según se desprende de los datos proporcionados por las autoridades británicas.
La nota relata cuáles son los síntomas iniciales que se producen tras una exposición "alta" al polonio 210, como "náuseas, vómitos, diarrea, salivación excesiva y deshidratación". "En los siguientes días, a estos síntomas se añaden fatiga importante, fiebre y tensión baja", añade el texto.
Contactos entre las autoridades
Sin embargo, Sanidad considera que la información facilitada por el Ejecutivo británico indica que esta incidencia supone "un riesgo para la salud pública muy bajo". En este sentido, destaca que "las personas que hayan viajado en los vuelos afectados" y no hayan manifestado "ninguna alteración" en su estado de salud "no tienen que adoptar ninguna medida".
Si, por el contrario, alguno de estos pasajeros ha experimentado alguno de los síntomas descritos, Sanidad recomienda que acuda "a su médico o centro de salud". Asimismo, el comunicado agrega que este departamento está "poniendo en marcha" los procedimientos de diagnóstico y evaluación para aquellos casos que, "en opinión de los profesionales sanitarios", requieran de "pruebas más específicas".
La nota informa de que el Ministerio de Sanidad, el Consejo de Seguridad Nuclear y las autoridades sanitarias de las comunidades autónomas están "en contacto permanente". "El Gobierno --prosigue el texto-- está también en comunicación con las autoridades competentes del Reino Unido, las autoridades sanitarias de la UE y los organismos internacionales relevantes".
Sanidad recuerda que el polonio 210 es un elemento "radiactivo tóxico" que existe de forma "natural" en el ambiente "en concentraciones muy bajas". Asimismo, subraya que las radiaciones que emite son de "corto alcance" y tienen "poco poder de expansión a distancia".
Sus efectos pueden producirse por ingestión, inhalación o a través de heridas abiertas, pero no se transmite de una persona a otra. El Ejecutivo español destaca que el polonio 210 está presente, entre otros ejemplos, en el humo del tabaco.
Los ciudadanos que deseen más información pueden consultar la sección que el Ministerio de Sanidad ha habilitado en su página web (www.msc.es) o llamar al teléfono gratuito de atención a los posibles afectados (900 400 430).
