El ganadero y guarda forestal Santiago Mainar ha explicado hoy que se inculpó del asesinato del alcalde de Fago, Miguel Grima, para llamar la atención y tras llegar a un acuerdo con la Guardia Civil para que dejaran de presionar a los vecinos de la localidad.

En la vista del juicio por el crimen del alcalde, que ha comenzado hoy en la Audiencia Provincial de Huesca, Mainar ha respondido a las preguntas del fiscal y, en sus primeras afirmaciones, ha ratificado su segunda declaración ante el juez instructor de Jaca, en la que se declaró inocente y se retractó de una primera en la que se culpó de los hechos.

Ha insistido en que con esta actitud quiso llamar la atención y ha revelado un "acuerdo tácito" al que llegó con la Guardia Civil por el que si se declaraba culpable, los agentes dejarían de presionar a los vecinos del pequeño pueblo.

Un guión mental

Sobre los detalles de cómo ocurrieron los hechos, ha señalado que los basó en "un guión mental de tres semanas", es decir, en la información que conocía, que había sido publicada en los medios de comunicación o por comentarios que le hicieron terceras personas, como cazadores, periodistas o vecinos, a quienes no ha identificado.

También ha comentado que es una persona acostumbrada a la lectura y a novelas policiacas, por lo que fue ideando una función teatral.

Incongruencias

El fiscal le ha preguntado sobre ciertas incoherencias en su declaración y él lo ha justificado con que estuvo varias horas en un calabozo, "sin luz, sin comida, con un agua seguramente con algún tipo de barbitúrico", y en esos momentos "la lucidez mental no era la que debía ser".

"La lucidez mental y la claridad mental" en esos momentos es "escasa", ha apuntado Santiago Mainar, a quien le han preguntado en repetidas ocasiones sobre los detalles de su primera declaración y en todo momento ha insistido en que se lo inventó o lo basó en lo que había oído.

Relación inexistente

Otra de las cuestiones a la que se ha referido, preguntado por el fiscal y por los dos abogados de la acusación, ha sido su relación con el alcalde, inexistente desde hace unos años por diferencias sobre la forma de gestión que debía llevarse a cabo en el pueblo, ha apuntado.

Ha dicho que estaba "indignado" con el alcalde. "Ante la arbitrariedad me indigno", ha recalcado, al tiempo que ha explicado que se limitó a diferenciarse de sus fechorías.

El fiscal pide para Mainar 21 años de cárcel, 20 por el presunto asesinato de Miguel Grima y uno por tenencia ilícita de armas, ya que supuestamente mató al alcalde con un disparo de postas realizado con una escopeta que no ha aparecido.

En la cárcel desde el 2007

Mainar ha llegado a la Audiencia de Huesca procedente de la cárcel de Zuera, donde permanece ingresado desde que fuera detenido a principios del mes de febrero del 2007, unos 20 días después de que se produjera el asesinato.

Antes de comenzar la vista, el abogado Enrique Trebolle, que representa a la familia de Grima, ha dicho a los medios de comunicación antes de comenzar la vista ha señalado, que aunque será duro revivir los hechos, hay pruebas concluyentes, como la propia declaración autoinculpatoria de Mainar, de la que luego se retractó, y las pruebas de ADN recogidas por la Guardia Civil.

Juicios paralelos

Por su parte, la hermana del guarda forestal, Marisa Mainar, ha pedido a los medios de comunicación que sean respetuosos porque su hermano "se juega 20 años", que dejen a los jueces trabajar y no hagan juicios paralelos.

Su hermano, ha dicho, está bien y muy tranquilo, con ganas de que se celebre el juicio porque confía en su inocencia, un asunto sobre el que también a hecho hincapié su abogado, Marcos García Montes, quien, ha declarado, va a intentar desmontar la "pintoresca" autoinculpación que hizo Santiago Mainar.

Testificarán 122 personas

La vista se prolongará durante unos ocho días en los que testificarán unas 122 personas, entre ellas vecinos de Fago, peritos, testigos y los guardias civiles que realizaron la investigación.