Las autoridades portuguesas se incautaron de 1.800 kilos de hachís y detuvieron a 10 sospechosos cerca de la localidad de Odemira, al sur de Portugal, de los que seis son españoles, alguno de ellos procedente de Extremadura, informó ayer el jefe de la Policía Judicial, Ricardo Macedo, quien dijo de que la operación se desencadenó tras avisar España. El grupo fue creado en Portugal, donde traficantes españoles y portugueses se conocieron en prisión. Los diez están en prisión preventiva.