"Ve, te toca a ti, 15 minutos cada uno y no tardes". Esas palabras salieron de la boca de Bryan e iban dirigido a su amigo Walter, según detalla la Fiscalía de Barcelona en su escrito de acusación por un ataque sexual grupal a una menor de edad el 29 de octubre del 2016 en una fiesta celebrada en una fábrica abandonada de Manresa. Bryan y Walter son dos de los seis jóvenes que este martes se han sentado en el banquillo de una sala de la Audiencia de Barcelona y a los que se les atribuye el delito de abuso sexual sobre menor, a la que llegaron a penetrar. Todos ellos se enfrentan a una pena que oscila entre los 14 y los 10 años de cárcel. A un sexto imputado se le reclama unos meses de prisión porque solo observó lo que hacían sus amigos y no hizo nada para evitarlo.

Los procesados han negado en la primera sesión del juicio, que se prolongará durante otros dos días, que mantuvieran relaciones sexuales con la víctima. Únicamente han reconocido que asistieron a esa fiesta en la fábrica de Manresa, cerca de la Fundación Universitaria del Bages, que bebieron y furmaron marihuana y que en la nave casi no había luz ("usamos la linterna del móvil", ha dicho uno). Nada más. Por negar hasta negaron que tuvieran unos motes como indica la fiscalía en su escrito de acusación.

La fiscalía sostiene, sin embargo, que ese 29 de octubre los procesados no solo fueron a la fiesta, sino que abusaron sexualmente de la menor, que iba embriagada y "consumió algún porro". Uno de los acusados, Bryan se la llevó a una caseta anexa a la nave principal de la antigua fábrica y allí, indice, la penetró. Después animó al resto de los encaudados que hicieran lo mismo. Fueron pasando uno a uno por la caseta donde estaba la muchacha, a la que "penetraron por turnos".

Según la acusación pública, tras la agresión sexual, uno de los proceesados exhibió una pistola de fogueo ante los presentes en la fiesta y, haciendo el gesto de cargarla, y con "ánimo de amedrantar a los testigos allí presentes", gritó: "Si alguien de los que estais aquó decis algo de lo que aquí pasa, tendreis problemas con vuestra familia". En la vista, los imputados han negado que alguin profiriera esa frase. La fiscalía, además, relata en su escrito de acusación que, días después, Bryan se puso en contacto con algunos testigos para decirles que no dijeran la verdad "si no querían tener problemas".