Privar de derechos a los maltratadores y proteger a las víctimas son las dos ideas principales que impregnan las más de 80 recomendaciones que el Senado presentó ayer con el consenso de los partidos. Entre las medidas destaca la posibilidad de que los malos tratos sean juzgados como delitos y no como simples faltas, así como que se introduzca una nueva figura penal: la de apología de la violencia contra las mujeres. El Senado también instó a los jueces a que suspendan las visitas y la patria potestad a los padres agresores.

Después de dos años de trabajo, la ponencia sobre la erradicación de la violencia doméstica del Senado presentó ayer sus recomendaciones. Estas serán ratificadas dentro de dos semanas y a partir de entonces serán enviadas al Congreso para que los diputados las estudien. Las medidas podrían entrar en vigor sólo si son aprobadas en el Congreso, cosa que en ningún caso sucedería de forma inmediata.

El texto aprobado por el Senado argumenta su petición de mano dura judicial contra los maltratadores porque "ante el derecho de un padre de ver a su hijo debe tenerse en cuenta que un padre maltratador nunca puede ser un referente educacional".

Los grupos políticos se mostraron de acuerdo en pedir a los jueces que anulen también la posibilidad de que los padres vean a sus hijos en los puntos de encuentro (zonas neutrales donde los niños ven a sus padres en caso de separación o divorcio) si la influencia del progenitor se considera negativa para los menores.

EL AGRESOR COMPARECERA

Con respecto a las medidas cautelares, el Senado reclamó que cuando se produzca una denuncia, el juez llame también al agresor para que comparezca ante las autoridades judiciales y, además, sea examinado por un médico forense que evalúe su potencial peligrosidad. El informe concluye que los agresores no son enfermos mentales, sino "personas machistas".

Paralelamente, El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña decidió ayer aumentar de 15 a 18 años de prisión la condena impuesta a Otman Meyahia, que mató a puñaladas a su pareja, a la que había maltratado.