La Audiencia Nacional ha condenado al grapo Israel Torralba Blanco a siete años de cárcel por un atraco a dos vigilantes de Prosegur en Barcelona en el año 2000 y ha absuelto a María de los Ángeles Ruiz Villa por los mismos hechos.

Según la sentencia, los hechos ocurrieron el 23 de septiembre de 2000, cuando el acusado, junto a Jesús Merino del Viejo y a otros dos miembros de los GRAPO "no identificados", abordaron a dos vigilantes de la empresa Prosegur encargados de la recaudación de un supermercado de la cadena Condis, en Barcelona.

Los cuatro grapos iban armados y, tras encañonar a los vigilantes, les arrebataron la recaudación, que ese día ascendía a 18.055 euros, así como los dos revólveres que llevaban, uno de los cuales fue intervenido posteriormente al grapo Israel Clemente tras haber sido utilizado en otros atentados como el que costó la vida a Ana Isabel Herrero en 2006 en Zaragoza.

La Audiencia Nacional considera que estos hechos quedaron probados en el juicio oral con las declaraciones de los dos empleados de Prosegur atacados, así como de un policía que estaba "casualmente" en el lugar de los hechos, y condena a Torralba a 7 años de prisión por un delito de robo con violencia e intimidación en las personas, además de uso de armas con finalidad terrorista. Además, el condenado tendrá que indemnizar a Prosegur, conjuntamente con Merino del Viejo, con 18.177 euros.

Sin embargo, la sala de lo penal de la Audiencia Nacional ha absuelto a la también grapo María de los Ángeles Ruiz Villa, acusada por estos mismos delitos, al considerar que no existe prueba suficiente de su intervención en el atraco, ya que negó haber cometido el delito y no aparece implicada en ninguna declaración sumarial.