Cataluña quiere parecerse a Massachusetts en I+D, según un deseo expresado a menudo. Sin embargo, mientras que en EEUU, donde el físico Omid Kokabee trabajó unos meses, las principales academias científicas han publicado declaraciones sobre su detención, en Barcelona, donde trabajó tres años, se han levantado pocas voces.
Las únicas acciones públicas en España son una carta abierta de la red de investigación Prisma (coordinada por la Universidad de Granada), una petición por internet de investigadores de Madrid, impulsado por el barcelonés Cluster de Fotónica y Optica del Sur de Europa y la web freeomid.org, promovida por un amigo. Lluís Torner, director del ICFO, asegura haber hecho gestiones con representantes diplomáticos iranís. La Universidad Politécnica de Cataluña (de la cual el ICFO forma parte) no ha tomado posición. Tampoco lo ha hecho la de Tejas, donde trabajó antes de ser detenido, pero sus estudiantes han exigido en un vídeo que lo haga. "La acción pública no garantiza la libertad, pero protege de los abusos", comenta Kamiar Alaei, médico que compartió celda con Omid.
