"TRANQUILIDAD y agradecimiento" fueron las palabras con las que Ramona Maneiro, excompañera del tetrapléjico Ramón Sampedro, acogió ayer la noticia del sobreseimiento de la causa en la que estaba imputada por ayudar a morir a su amigo. El juzgado número 2 de Ribeira ha decidido no mantener el proceso por un delito de cooperación al suicidio que ya ha prescrito, un caso reabierto el 11 de enero, a petición del fiscal, después de que Maneiro confesara en un programa de televisión que había ayudado a morir a Sampedro. A. S.