Despliegue, sí, pero menos. La movilización de medios anunciada por el Gobierno para atender al proceso de regularización que empieza el próximo lunes no es tan importante como parecía a primera vista. El Ejecutivo aclaró ayer que las oficinas de atención al público abrirán entre las tres y las seis de la tarde de lunes a jueves. Sólo 12 horas a la semana.

El insólito horario se debe, según un portavoz de la Seguridad Social, a que por las mañanas los funcionarios "deben seguir atendiendo al resto de los ciudadanos" en el marco de sus tareas ordinarias. Todas las oficinas habilitadas para la regularización pertenecen a la red de la Seguridad Social. Las de extranjería se dedicarán en exclusiva a tramitar internamente los expedientes.

Las escasas horas de atención pueden verse agravadas por la confusión creada. Durante la presentación del operativo, efectuada en Madrid la pasada semana, la subsecretaria de Administraciones Públicas, Dolores Carrión, apuntó que "el horario de las oficinas se ampliaba a la tarde", pero casi todos los medios de comunicación interpretaron que se alargaba, no que se limitaba a la tarde. En la exhaustiva información incluida por el Ministerio de Trabajo en su web (mtas.es) no figura ni una sola referencia al horario.

¿Será suficiente el encogido horario para eludir las colas? Fuentes del Ministerio de Administraciones Públicas aseguraron que el dispositivo es capaz de atender en los tres meses que dura el proceso

800.000 solicitudes --el máximo que prevé recibir el Gobierno--, a una media de 20 minutos cada una. La red de atención se compone de 160 oficinas.