El Tribunal Supremo elevó ayer de dos años y tres meses a 10 años la inhabilitación del juez Ferrín Calamita por un delito de prevaricación por impedir a una lesbiana la adopción de la hija de su esposa. El tribunal afirma que el magistrado retrasó "anormalmente" la adopción. También, que llevó a cabo "un despliegue de activa obstrucción beligerante" para impedir "la aplicación de la solución dada por la ley" que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo y la adopción a los homosexuales.

El tribunal acusa al juez de actuar "en paralelo a una ideología jurídica o metajurídica propia o de algún sector social" para retrasar la adopción. Por ello, dicen que optó por cuestionar "la idoneidad para la adopción por razón de la orientación sexual" de la mujer.