El extremeño Alejandro Talavante, que sufrió una fuerte voltereta el pasado jueves toreando en Almería, tiene finalmente "una fractura del extremo distal de la clavícula izquierda", determinada en una resonancia que se le ha practicado veinticuatro horas después del percance.

Según los resultados del estudio radiológico al que fue sometido ese día, sufría "distensión ligamentosa acromio-clavicular izquierda", una lesión que en palabras del doctor Diego Morata Artés, cirujano jefe de la plaza, "es molesta pero no grave", y cuyo tratamiento es "ejercitar la zona afectada".

El primer parte, emitido en la enfermería de la plaza, recogía lo siguiente: "contusión en el hombro izquierdo con dolor y cierta impotencia funcional, por lo que se le recomienda estudio radiológico por posible lesión acromio-clavicular, de pronóstico reservado". Pero Talavante, según fuentes de su entorno, seguía el viernes con fuertes dolores y una gran inflamación en la zona, por lo que acudió a un centro clínico en Badajoz donde se le hizo otro estudio radiológico, en el que se ha determinado esta lesión, más grave de la inicialmente considerada. Le han inmovilizado el hombro y deberá estar en reposo un tiempo indeterminado.