El juicio se retomó ayer con el turno de los peritos. Con matices, todas las conclusiones apuntaron en la misma dirección en el caso de las cuatro niñas: alta probabilidad de que los abusos se hubieran cometido en todos los casos y ningún indicio de fabulación.

Las dos peritos judiciales que exploraron a S., de 11 años, la que sufrió los peores abusos --describe penetraciones bucales y un intento de penetración anal-- desaconsejan en su informe que volviera a declarar.