La sanidad ha experimentado un empeoramiento generalizado en todas las comunidades autónomas por primera vez en los últimos diez años, especialmente en indicadores como las listas de espera, aunque se mantienen las diferencias entre unas y otras, que lejos de disminuir se han incrementado. Es una de las principales conclusiones del X informe de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) sobre los servicios sanitarios, que analiza una veintena de parámetros que incluyen, además de las listas de espera, el gasto per cápita, el número de camas y profesionales, el gasto farmacéutico o la valoración de los ciudadanos.

Según el estudio, presentado por el presidente de la FADSP, Marciano Sánchez Bayle, la comunidad con mejores servicios sanitarios es Navarra, que obtiene una puntuación de 65 sobre un máximo de 78; seguida de Aragón, Asturias, País Vasco y Castilla y León. Galicia, Cantabria y Andalucía tienen servicios "aceptables", en tanto que la sanidad pública es "regular" en Extremadura (47 puntos), La Rioja, Cataluña, Madrid y Castilla-La Mancha. Con servicios sanitarios "deficientes" se sitúan de nuevo Baleares, Murcia, Canarias y la Comunidad Valenciana, que se mantiene a la cola del ránking. Las diferencias entre comunidades (35 puntos entre la primera y la última) es "claramente excesiva", lo que evidencia una "gran disparidad" en los servicios sanitarios, según Bayle.