Los fármacos antirretrovirales que reciben los afectados por el VIH reducen en un 44% el riesgo de infección si los toman a diario personas sanas. Así se ha comprobado en un estudio coordinado desde EEUU con 1.250 individuos homosexuales de activa vida sexual. Este hallazgo, elogiado ayer por la Casa Blanca y publicado por la revista New England Journal of Medicine , es relevante en relación con el colectivo social analizado, y será eficaz en el tratamiento de los grupos en máximo riesgo de sufrir una infección del virus del sida, en especial el de los homosexuales.

El tratamiento, no obstante, resultaría poco eficaz como recurso preventivo para toda la población. "Los medicamentos antisida son tóxicos y para reducir menos del 50% el riesgo de infección del VIH habría que tomarlos a diario, a diferencia de las vacunas habituales, que se reciben una vez en la vida salvo la de la gripe, que es anual y ofrecen una protección de hasta el 90%", explicó ayer Josep Maria Gatell, responsable de la atención del sida en el Hospital Clínic, de Barcelona. La protección del 44% observada en el estudio desaparece si el individuo abandona el tratamiento antirretroviral.

LOS HOMOSEXUALES Los colectivos de homosexuales son los grandes focos donde está reapareciendo una elevada tasa de nuevos contagios del VIH, tanto en EEUU como en Europa. En la investigación difundida han participado hombres de Suráfrica, Tailandia, Perú, Ecuador, Brasil y EEUU, que se comprometieron a tomar a diario un fármaco antirretroviral llamado Truvada (emtricitabina y tenofovir).

La publicación del estudio coincidió con la publicación de los datos del informe mundial del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (Onusida), que indica que las nuevas infecciones cayeron un 20% en la última década (unos 2,6 millones de nuevos infectados en el 2009 frente a los 3,1 millones de 1999), en parte, según el organismo, por un mayor uso del preservativo. Este aumento se da sobre todo en países con mayor incidencia, y entre homosexuales y profesionales del sexo. Además, la prevalencia del VIH entre jóvenes de los 15 países más afectados cayó un 25% gracias a prácticas sexuales más seguras. El mismo informe indica que el número de personas con VIH creció hasta 33 millones, en parte porque la esperanza de vida ha aumentado por el uso de antirretrovirales.