Los heridos graves formarán parte a partir de hoy de las estadísticas diarias de la Dirección General de Tráfico (DGT). Es el nuevo reto. Dado que la cifra de víctimas mortales se ha reducido prácticamente a la mitad en los últimos cinco años (4.029 en el 2003, 2.182 en el 2008) y la tendencia en los primeros meses de este ejercicio es aún a la baja, Tráfico ha decidido poner el foco en los heridos graves, un concepto que incluye a toda aquella víctima que tras el siniestro pasa al menos 24 horas ingresada en un centro hospitalario y que, cifras en mano, es una asignatura en la que España todavía suspende estrepitosamente.

DRAMA PUBLICITADO En el año 2007 (último ejercicio del que se tienen datos oficiales) 19.295 personas sufrieron heridas graves en la carretera. En el 2003 fueron 26.305. El descenso no es equiparable en absoluto al de víctimas mortales. De ahí la decisión de la DGT de dar más publicidad a ese drama menos conocido, el de la secuelas que dejan los accidentes de tráfico, a menudo de por vida.

Por el momento, el balance de heridos graves que esta Semana Santa proporcionará la DGT es una prueba piloto, pues recabar la información con exactitud requiere canales distintos a los actuales. Deberán ser los hospitales los que faciliten a Tráfico la información necesaria, siempre con 24 horas de espera para que se cumpla el plazo en que el herido se considera grave. Tanto los Mossos d´Esquadra como la Ertzaintza se han comprometido a colaborar en la iniciativa.

TAREA COMPLICADA La tarea no es fácil, pero el director general de Tráfico, Pere Navarro, ha decidido acometerla porque también "lo demanda la Unión Europea" y "ya lo hacen los países más avanzados en materia de seguridad vial". La Semana Santa, en cualquier caso, será un primer test en el que tener en cuenta la cifra de heridos graves en las carreteras españolas y también servirá para certificar si la mortalidad sigue en descenso, tal y como ha sucedido en los meses de enero, febrero y marzo. Por el momento, la cifra de fallecidos es un 11,5% inferior a la del 2008 en el mismo periodo. Con todo, a causa de la crisis será una comparativa imprecisa. El cálculo, además, puede quedar condicionado al alza por el mal tiempo.