La Audiencia de Barcelona ha confirmado una condena de tres años de prisión a una mujer por permitir que su compañero sentimental maltratara a su hija de siete años y haber intentado ocultarlo mintiendo a los médicos que atendieron a la niña en el hospital. En la sentencia, la sección vigésima de la Audiencia de Barcelona desestima el recurso que la mujer, Aurora M., presentó contra la sentencia que condenó a ella y a su pareja por sendos delitos de lesiones, a raíz de los maltratos que su hija recibió la noche del 7 de junio de 2004.

La procesada alegaba que ella no había puesto una mano encima a la pequeña, pero el tribunal la considera igualmente responsable de las lesiones que sufrió su hija por permitir que esa noche durmiera con el acusado pese a la evidencia de episodios anteriores "claramente sospechosos" de maltrato. El tribunal critica la "absoluta desidia" de la madre de la víctima, que explicó que se había tomado dos tranquilizantes y se había ido a dormir a otra habitación, dejando a su hija con el maltratador, por lo que, en su opinión, "merece, si cabe, mayor reproche penal".

Para la Audiencia, la procesada "menospreció sus deberes de guarda, cuidado y protección que le eran inherentes" al haber dejado a la pequeña durmiendo con su agresor y haber intentado incluso curar con tiritas la brecha que la niña tenía en la cabeza, que precisó puntos de sutura. La mujer mintió a los médicos del hospital achacando las lesiones que presentaba la menor a "accidentes domésticos", pese a que la niña tenía heridas, mordeduras, hematomas y arañazos por todo el cuerpo que el médico forense atribuyó sin duda a la agresión de una tercera persona.

Los partes hospitalarios y los informes emitidos por el médico forense y el perito psicológico evidencian "el abominable maltrato físico y psíquico a que fue sometida la víctima entre la noche del 7 de junio y la mañana del 8 de junio de 2004".