Los astronautas Guennadi Padalka de Rusia, Michael Fincke de Estados Unidos y André Kuipers de Holanda viajaron ayer a bordo de la nave rusa Soyuz TMA-4 hacia la Estación Espacial Internacional (ISS).

La Soyuz-TMA-4 fue impulsada por un cohete Soyuz-FG que despegó a las 03.19 GMT desde el cosmódromo de Baikonur, en la república de Kazajistán, en Asia Central, informó un portavoz de las Fuerzas Espaciales de Rusia, responsables del lanzamiento.

Once minutos después del lanzamiento, a las 07.28 GMT, el Centro de Control de Vuelos Espaciales (CCVE) comunicó que la Soyuz-TMA-4 se había separado del portador Soyuz-FG a 200 kilómetros de altura, y que había iniciado su vuelo autónomo hacia la ISS.

La nave efectuará en las próximos dos días un total de 34 vueltas a la Tierra y elevará, con ayuda de sus propulsores, la altura de su órbita hasta alcanzar los 370 kilómetros, es decir, la altura en la que se encuentra la ISS.

De acuerdo con el programa de vuelo, se acoplará a uno de los muelles del módulo ruso Zvezdá de la ISS mañana a las 05.03 GMT en régimen de acoplamiento automático.

EL REGRESO Padalka y Fincke integran la novena expedición permanente en la ISS, y sustituirán a Foale y Kaleri, mientras que Kuipers, astronauta de la Agencia Espacial Europea, regresará a la Tierra dentro de una semana junto con los dos astronautas relevados.

Los tres convivirán durante al menos nueve días con Foale y Kaleri, y mientras rusos y norteamericanos se ocupan del relevo de las expediciones Kuipers realizará experimentos previstos en la misión Delta , preparada por científicos de Holanda y la ESA.

Antes del despegue Padalka, el comandante, afirmó que los dos días a bordo de la Soyuz-TMA-4 previos al acoplamiento serán los menos confortables, porque en la nave rusa no hay lugar para dormir ni tampoco para calentar la comida.

"Hasta que lleguemos a la ISS tendremos que dormir a ratos porque la nave es muy estrecha, y como a bordo no se puede calentar la comida, nos conformaremos con conservas, zumos y chocolate", dijo el cosmonauta a la agencia oficial rusa Itar-Tass.

Padalka, de 45 años, coronel de la Fuerza Aérea de Rusia, ya estuvo, durante 199 días, en el espacio en la estación Mir.