Una de cada tres mujeres mayores de 15 años ha sido víctima alguna vez en su vida violencia machista, física, psicológica o de ambas. Una de cada tres ha sufrido abusos psicológicos de su pareja y una de cada 20 ha sido violada. Estas alarmantes cifras ilustran una nueva campaña contra la violencia machista a través de las redes sociales que la Comisión Europea ha decidido lanzar en toda la Unión Europea con un objetivo: remover conciencias y movilizar a la sociedad europea para que lance un sonoro “Di no! Stop a la violencia contra la mujer”.

La comisaria de justicia e igualdad de género, Vera Jourová, reconoce que existe un problema en Europa y que las cifras pueden ser solo la punta del iceberg, ya que se estima que solo se notifican entre el 12% y el 15% de los ataques debido a que no hay confianza en la policía o en los servicios de atención a las víctimas. “Quiero que el 2017 sea el año del cambio para terminar con la violencia contra la mujer. Para finales de ese año, espero que cualquier mujer que experimente la violencia se sienta cómoda para denunciarlo a la policía y recibir el apoyo que merece”, afirma.

REALIDADES DIFERENTES

Uno de los primeros obstáculos a los que se enfrentan las autoridades es que no hay definiciones comunes, que lo que se entiende por violencia de género en Escandinavia puede ser percibido como un cumplido en otros países. Por eso cada Estado miembro deberá focalizar la campaña a su realidad particular y adaptar los mensajes a su público. Un trabajo que contará con 4 millones de euros de financiación europea para desarrollar campañas de información y proyectos de educación que ayuden a combatir una lacra que, según denuncia Jourová, es generalizada y sobre la que es necesario concienciar a la ciudadanía europea.

Y es que los datos, recogidos en un nuevo Eurobarómetro elaborado para la ocasión, muestran una realidad sumamente preocupante. El 17% de los ciudadanos europeos conocen a alguna mujer que ha sufrido violencia machista en su barrio y el 9% en su entorno de trabajo o estudio. Un fenómeno del que no se habla simplemente porque el 26% consideran que no es de su incumbencia, el 18% porque no tienen pruebas y el 16% porque no quieren crear problemas. Además, el 15% de los encuestados consideran que la violencia doméstica es una cuestión privada que debe ser gestionada dentro de la familia.