El 2006 se estrenó ayer con tres jóvenes muertos de forma violenta en Madrid, Córdoba y Bilbao. En el primer caso, el fallecimiento fue por un disparo. En los otros dos, por arma blanca.

El primer suceso ocurrió en torno a las las 3.45 horas en el madrileño distrito de Carabanchel, donde un joven de 20 años y nacionalidad rumana falleció tras recibir un tiro en el pecho durante una fiesta de Nochevieja que se celebraba en un domicilio particular, ubicado en la plaza de la Rendición de Breda. Tras ser avisados por los asistentes a la fiesta, los servicios de emergencia intentaron reanimar a la víctima, pero fue imposible y se limitaron a certificar su fallecimiento.

A lo largo de todo el día, la policía interrogó en calidad de testigos a los participantes en la reunión, en la que se dieron cita los miembros de una familia rumana y varios amigos compatriotas. Los agentes investigan si el disparo que acabó con la vida del joven procedía del exterior y penetró en la vivienda a través de una ventana que esta abierta. Fuentes del caso explicaron que se trata de una hipótesis que "cada vez cobra más fuerza".

Además del suceso, los servicios de emergencia de Madrid tuvieron una madrugada complicada ya que recibieron 68 avisos de peleas. Es decir, una cada siete minutos.

Alrededor de las seis de la mañana, otro joven, en este caso de nacionalidad argelina, murió después de recibir una puñalada en el abdomen en el transcurso de una reyerta que se produjo en la calle Alderetes del barrio de Ciudad Jardín, una zona de bares de Córdoba.

Tras el crimen, los agentes detuvieron a un hombre de etnia gitana como supuesto autor del homicidio. El segundo responsable de la muerte del joven fue identificado, pero huyó.

En Córdoba, al igual que en Madrid, se registraron durante la madrugada numerosas peleas en cotillones y salas de fiestas. Una de ellas se saldó con dos jóvenes, que recibieron múltiples heridas de navaja en el tórax y el abdomen.

DETENCIONES Por último, otro joven de 19 años y también de origen extranjero murió en torno a las 7.30 horas tras recibir una puñalada en el pecho en la confluencia de las calles José María Olabarri y Navarra, en pleno centro de Bilbao. La Ertzaintza detuvo por la tarde a un joven de 18 años vecino de Aramaiona y también extranjero, mientras continuaba buscando a otros por su presunta implicación. Según ha informado el departamento vasco de Interior, el arresto se produjo hacia las cinco y la investigación policial continúa.

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REDACCIONepextremaduraelperiodico.com

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