LOS VECINOS de Lorca (Murcia) rememoraron ayer su pesadilla tras registrarse tres terremotos de pequeña escala y sin que causaran daños, después del que el 11 de mayo derrumbó numerosos edificios y mató a nueve personas. El número 112 registró casi cien llamadas poco después de la 1.24 de la madrugada, cuando se registró el primer seísmo.