OCURRIO EL pasado 25 de abril, a plena luz del día y frente al Centro de Tratamiento de Denuncias Automatizadas, en León. Un conductor llegó a toda velocidad y se puso a hacer trompos ante la imponente estatua que recuerda a las víctimas de accidentes de tráfico. Las cámaras del edificio captaron las peligrosas maniobras y cómo el automovilista abandonaba el lugar envuelto en una nube de humo de sus neumáticos. El conductor todavía no ha sido identificado, pero la Dirección General de Tráfico, que no difundió el vídeo hasta ayer, ya ha advertido de que el infractor podría acabar en la cárcel.