La decisión del Tribunal Supremo de alargar la estancia en la prisión de José Rodríguez Salvador, el violador del Vall d´Hebron, abre las puertas a la revisión de la ejecución de la condena de asesinos y violadores múltiples, con el objetivo de que los delincuentes que presentan riesgo de reincidencia permanezcan en prisión el máximo tiempo posible.

Sin embargo, el fallo del alto tribunal no soluciona el conflicto con los reincidentes, pues un día u otro esos peligrosos criminales abandonarán la cárcel y saldrán en libertad. Por eso, desde diferentes ámbitos de la judicatura y la Administración se está reclamando una reforma legislativa para aplicar la libertad vigilada de esta personas cuando, tras cumplir la pena, vuelvan a pisar la calle. En el punto de mira está Miguel Ricart, condenado por asesinar a las tres niñas de Alcàsser en 1992. La fiscalía de Valencia pretende que todavía no salga libre.

NO SOLO ETARRAS La Audiencia de Barcelona ordenó ayer la detención y e ingreso en prisión de Rodríguez Salvador, que solo cumplió 16 de los 311 años de prisión por los que fue condenado por una ristra de agresiones sexuales a mujeres. El Supremo remitió por la mañana a los tribunales de Barcelona el fallo en el que acuerda que debe aplicarse a este violador la denominada doctrina Parot y que, por lo tanto, tiene que estar cuatro años más entre rejas (hasta el máximo de 20 años de cumplimiento). Esta doctrina, que toma el nombre del etarra francés Henri Parot que originó la primera resolución, establece que los beneficios penitenciarios se deben computar sobre cada una de las condenas y no sobre el total.

La fiscala superior de Cataluña, Teresa Compte, impulsora del recurso sobre el violador del Vall d´Hebron resuelto por el Supremo, afirmó que desde que Rodríguez Salvador pisó de nuevo la calle, en septiembre del 2007, ha estado vigilado por las fuerzas de seguridad del Estado para "prevenir el delito", pero siempre resguardando su libertad y sus derechos, pues hasta ayer había cumplido la condena. Compte insistió en que la Guardia Civil de la comunidad donde reside Rodríguez Salvador lo tiene localizado. Al abandonar la cárcel, el violador se trasladó a Andalucía. La Guardia Civil lo detuvo ayer por la tarde en Armilla (Granada) y se ordenó su ingreso en la cárcel granadina de Alborote.

Compte aseguró que la decisión del Supremo "abre la puerta" a que la doctrina Parot se pueda aplicar en otros procesos. Son pocos, porque se refieren a personas condenadas por el Código Penal de 1973 y no por el nuevo de 1995, pero alarmantes, como el del asesino de las niñas de Alcàsser. Si se calcula la liquidación de condena de la forma habitual (contando los beneficios penitenciarios), Ricart debería salir de la prisión en el 2011, dentro de tres años. Y eso es lo que ha causado alarma y ha llevado a la Fiscalía de Valencia a solicitar que el recuento se haga sobre cada condena que pesa sobre él (tres delitos de asesinato y cuatro de violación, en concurso con tres de rapto). Eso conllevaría que siguiese entre rejas hasta el 2023. Este es un caso, pero en España hay otros y las fiscalías es pondrán en marcha.