"No contrato gitanos porque siempre tienen un familiar enfermo". "Trabajo con objetos de valor y podrían robarme". Estas frases atribuidas a empresas y agencias de trabajo temporal son dos de los ejemplos que esgrimió ayer el Observatorio Europeo sobre Racismo y Xenofobia para alertar del aumento de la discriminación "oculta" en España. Según el informe anual de este organismo, los inmigrantes y los gitanos sufren verdaderas complicaciones en materia de empleo, vivienda y educación, "por lo que es necesario que se apliquen realmente las leyes de igualdad ya exixtentes", reclamó ayer la presidenta de la entidad, Beate Winkler.

España es uno de los cinco países de la UE, junto a Grecia, Italia, Chipre y Malta, que no ha proporcionado al observatorio datos oficiales. Los datos los han aportado oenegés como SOS Racismo.