La Comisión Europea aprovechó ayer la tensión provocada por la llegada de la gripe aviaria a las puertas de la UE para colgarse una medalla en la lucha contra el virus. Bruselas anunció que un proyecto científico que recibe fondos del Programa Marco de Investigación de la UE ha logrado desarrollar una vacuna contra la gripe aviaria lista para ser probada en seres humanos.

TRABAJO CONJUNTO El proyecto conjunto de Gran Bretaña, Reino Unido, Italia, Francia y Noruega, sin embargo, va a necesitar unos cinco años más para dar resultados. Y la vacuna no sirve contra el virus H5N1, que es la variedad más peligrosa y que ha causado la muerte de 60 personas en Asia, además de miles de aves. La vacuna se aplicaría contra un virus de gripe aviaria menos peligroso, el H7N1.

El H7N1 causó en 1999 una gran mortalidad entre las aves en Italia. Además, está relacionado con el virus H7N7, que en

2003 obligó a sacrificar miles de aves en Holanda y causó la muerte de un veterinario que había estado en contacto con los animales.

Bruselas asegura que este virus ha sido identificado por la comunidad científica como uno de los que, al igual que el de la gripe aviaria asiática, podría mutar y provocar una pandemia entre los humanos. Los expertos de la Comisión aseguraron ayer que con esta nueva vacuna se amplía la panoplia de respuestas contra una hipotética pandemia, y un nuevo recurso para el desarrollo de otras vacunas en el futuro.

MENOS ANTIVIRALES La única medicina efectiva ante la cepa H5N1, el Tamiflu, no será distribuida en las próximas semanas en varios países, entre ellos Estados Unidos. Roche, la empresa que ha patentado el antiviral, anunció ayer dicha medida para evitar que la gente acumule las medicinas en casa ante el temor de una pandemia.

Un portavoz de la firma dijo que la prioridad es asegurar la disponibilidad del antiviral para su uso cuando se declare la gripe estacional entre los pacientes, así como para atender los pedidos realizados por los gobiernos.