Los ministros europeos de Transporte han llegado hoy a un acuerdo para flexibilizar el cierre del espacio aéreo sin poner en riesgo la seguridad, según han confirmado fuentes diplomáticas. Los Veintisiete aceptan así la propuesta que les había planteado Eurocontrol, la agencia europea para la seguridad de la navegación aérea, de reducir el espacio prohibido a raíz de la nube de ceniza volcánica procedente de Islandia.

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La medida se ha tomado después de las duras críticas recibidas por Eurocontrol de las compañías aéreas, que consideraban excesivo el cierre total del espacio aéreo.

La decisión de los Veintisiete supondrá la creación de tres zonas en función de la seguridad aérea. En la zona 1, próxima al núcleo central de las emisiones volcánicas, la restricción de vuelos seguirá siento absoluta. La zona 2 será aquella en la que, aunque se aprecien cenizas, estas no impiden las operaciones aéreas, y la zona 3 será la que no está afectada por las cenizas. En el caso de la zona 2, la decisión sobre la apertura del espacio aéreo se tomará de forma coordinada por las autoridades de los países miembros de la UE.

Seguridad garantizada

El ministro español de Fomento, José Blanco, que ha participado en la reunión de la UE y Eurocontrol, ha avanzado que la definición concreta de las zonas se concretará "en las próximas horas" y estas serán efectivas a partir de las 08.00 horas de mañana. Blanco ha subrayado que las decisiones sobre las operaciones aéreas se tomarán "en cada momento con datos técnicos y garantizando la seguridad". "No se tomarán medidas que no garanticen la seguridad", ha insistido el ministro.

En paralelo, se permitirá a las compañías aéreas decidir por sí mismas si prestan servicios en zonas menos contaminadas fuera de esa primera franja roja. Las aerolíneas deberán, no obstante, realizar controles posteriores al vuelo para asegurarse de que se respetan los niveles de seguridad necesarios.