La Comisión Europea impuso ayer una nueva multa de 561 millones de euros a Microsoft por prácticas abusivas ilegales, al incumplir su compromiso con la Unión Europea (UE) de facilitar a los usuarios de ordenadores la libre elección del navegador de internet. La multinacional informática norteamericana dejó de ofrecer esa libre elección de navegador durante 14 meses en la UE y volvió a imponer por defecto su navegador Internet Explorer entre mayo del 2011 y julio del 2012.

Microsoft utiliza esta práctica para obstaculizar que los usuarios de los ordenadores equipados con su sistema operativo utilicen los navegadores de la competencia y gracias a ella llegó a conseguir un dominio mundial casi absoluto para su navegador hasta la intervención del Ejecutivo comunitario.

El comisario de Competencia, Joaquín Almunia, calificó de "muy grave" la nueva infracción a las normas europeas de libre competencia, ya que incumplió un compromiso legalmente vinculante suscrito con la UE, por lo que debía "ser sancionada en consecuencia". "Es la primera vez que una compañía se atreve a incumplir los compromisos suscritos con la UE" tras un caso de violación de las reglas de competencia, dijo.

A raíz del expediente abierto por la Comisión Europea en el 2008 por la imposición por defecto a los usuarios de ordenadores con el sistema Windows del navegador de Microsoft, la firma norteamericana se comprometió con la UE en diciembre del 2009 a facilitar a todos los usuarios la libre elección del navegador en Europa hasta el 2014. Tras la introducción del Service Pack 1 del Windows 7, dejó de ofrecer esa libre elección. El volumen de la sanción equivale al 1% de su facturación durante el periodo afectado, aunque podría haber llegado al 10%, dijo Almunia, quien espera que "la decisión sirva para que otras compañías se lo piensen dos veces antes de incumplir sus compromisos".