La situación es muy preocupante. Hasta tal punto, de que Comisión Europea y Organización Mundial de la Salud (OMS) han decidido unir fuerzas con un objetivo común: detener la propagación de enfermedades infecciosas evitables por vacunación, como el sarampión, y responder a la información falsa difundida a través de las redes sociales. En algunas partes del mundo hay personas que mueren por falta de vacunas. Aquí arriesgan sus vidas y las de los demás al rechazarlas. No juegan a la prevención, prefieren jugar con fuego, ha alertado el presidente del Ejecutivo comunitario, Jean-Claude Juncker, durante la primera cumbre mundial sobre vacunas.

Según un Eurobarómetro de abril, el 48% de la población europea considera que las vacunas puede producir a menudo efectos secundarios graves, el 38% que pueden provocar enfermedades contra las que protegen mientras que el 31% está convencido de que pueden debilitar el sistema inmunitario. Este es el caso de la madre de Ethan Lindenberger, el joven activista que cuando cumplió la mayoría de edad se rebeló contra su madre y se vacunó, y que ha acudido a Bruselas a contar su experiencia.

En la Comisión Europea achacan el auge del movimiento antivacunas a las campañas de desinformación que se propagan a través de medios digitales y redes sociales. Una situación que ha desembocado en una reducción del número de vacunaciones en el viejo continente. El índice de vacunación en Europa está reduciéndose y la situación empeora desde 2018. En la primera mitad de 2019 ha habido unos 90.000 casos de sarampión en toda Europa (350.000 en todo el mundo), más que todo el año pasado (84.462 casos) y cuatro países (Albania, Grecia, República checa y Reino Unido) han perdido el estatus de país libre de sarampión, ha explicado el comisario de sanidad, Vytenis Andriukaitis.

84 MUERTOS POR SARAMPIÓN

La dramática consecuencia es el aumento en el número de muertes. Entre el 1 de enero de 2016 y el 31 de marzo de 2019, solo en la UE y en los países del Espacio Económico Europeo, han muerto 84 personas por sarampión mientras que entre julio de 2018 y junio de 2019 se han notificado 483 casos de rubéola en cinco países (España, Italia, Alemania, Polonia y Rumanía). Es inaceptable que en el siglo XXI, siga habiendo niños que mueren por enfermedades que hace tiempo deberían haber sido erradicadas, se ha quejado Juncker. Las vacunas eficaces existen y cada minuto que no actuemos estamos perdiendo vidas, sobre todo vidas de niños, ha añadido Andriukaitis.

Tanto la Comisión como la OMS consideran que se trata de un reto mundial de ahí su llamamiento a plataformas como Facebook o Pinterest para que actúen con urgencia contra las noticas falsas. Tras muchos años de avances nos encontramos en un punto de inflexión crucial. El sarampión resurge y uno de cada diez niños siguen sin recibir vacunas infantiles esenciales (20 millones en todo el mundo). Podemos y debemos corregir el rumbo, ha reclamado el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreysus.

AUMENTAR LA COBERTURA MUNDIAL

Ambas instituciones, que han aprobado un décalogo de recomendaciones, han puesto el foco en dos problemas: la desinformación, que afecta a los países desarrollados pero también a aquellos menos desarrollados como Pakistán o la República democrática del Congo, y la falta de acceso a vacunas debido a los recortes presupuestarios o problemas de abastecimiento. Según las cifras del Ejecutivo comunitario las vacunas permiten evitar entre dos y tres millones de muertes cada año y podría evitar otro millón y medio si se aumentara la cobertura mundial.