La identificación legal del cadáver de Carmen Rus no será fácil. La cal se ha comido casi todo el cuerpo y no quedan más pruebas que los huesos, por lo que será difícil obtener una huella dactilar para cotejarla con la que los investigadores poseen en la comisaría de Cornellá, donde la mujer renovó por última vez el DNI y donde su hijo pasó ayer todo el día. Hoy está previsto que el detenido pase a disposición del Juzgado de Instrucción.