La Universidad de Sevilla ha acordado hoy en un consejo de gobierno extraordinario anular el artículo 20 de la normativa de evaluación de exámenes que avala el derecho del alumno a terminar la prueba tras ser sorprendido copiando y en torno al cuál se ha producido una polémica en los últimos días.

El rector de la Hispalense, Joaquín Luque, ha señalado al término del consejo de gobierno que sus integrantes han acordado, "con un alto grado de consenso", revisar la redacción del artículo con el fin de evitar "interpretaciones incorrectas".

Aunque ha asegurado que la universidad iniciará esta revisión de manera "inmediata", el rector no ha precisado la fecha en que se acordará volver a redactar el artículo ni los términos en que quedará reflejado en la normativa sobre evaluación y calificación por tratarse, según él, de un proceso "abierto" y "complejo".

Luque ha apuntado que desde que se aprobó la normativa en septiembre pasado se han celebrado muchos exámenes "dentro de la más absoluta normalidad" y ha manifestado la decisión del consejo de gobierno plasmada en una declaración de "reafirmar el compromiso con la recompensa al mérito y el esfuerzo, la reprobación de conductas fraudulentas y la alta valoración de la figura del profesor".

"Por más vueltas que le he dado me cuesta mucho trabajo que de la lectura de la normativa se pueda interpretar un derecho a copiar", ha expresado Luque, y ha subrayado que, para evitar esa interpretación y "por si hubiese alguna duda al respecto", se ha acordado dejar sin efecto el artículo referente a la actuación del profesor que sorprenda a un alumno realizando esta práctica.

Tras la decisión, el consejo de gobierno -integrado por representantes de alumnos, profesores, personal de administración y servicios y directores de departamentos-, las actuaciones sobre sanciones en caso de que un estudiante sea sorprendido copiando en un examen quedan "exactamente igual" que antes de la aprobación de la normativa, ha explicado Luque.

A este respecto ha apuntado que a partir de ahora la medida sancionadora que se adopte contra el alumno acusado de copiar volverá a quedar a discreción del profesor y ha incidido en el hecho de que la Universidad de Sevilla "no permite copiar".

"El alumno que copia no demuestra que sabe, y necesariamente no puede aprobar la asignatura, y esto ha venido pasando antes de la normativa, con la normativa y después de la suspensión del artículo", ha sentenciado.

Asimismo ha aseverado que si el estudiante sancionado considera que ha sido tratado injustamente tendrá "las garantías correspondientes, podrá reclamar y podrá revisarse adecuadamente si la actuación de un profesor ha sido o no correcta".

El rector ha señalado que la polémica generada en torno al artículo 20 de la normativa de evaluación "no ha ayudado" a la imagen de la Universidad de Sevilla de cara a conseguir, en la próxima convocatoria, la nominación de Campus de Excelencia Internacional.

Por este motivo ha confiado en que pueda restañarse la imagen de la Hispalense, y ha aseverado que la Universidad está "en condiciones de seguir apostando" por la nominación de Campus de Excelencia "al margen de la polémica".