La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, ha dado las indicaciones precisas para que los usuarios de las líneas 2 sur, 7 y 10 de Cercanías de Renfe viajen gratis a partir de mañana martes, según ha informado dicho ministerio en un comunicado. Estas líneas están directamente afectadas por la interrupción del servicio ferroviario entre Bellvitge y Barcelona-Sants desde el pasado sábado por las obras del tren de alta velocidad a su entrada en la capital catalana.
Los viajeros, en una medida excepcional, podrán acceder a los trenes y autobuses habilitados por Renfe sin necesidad de adquirir título de transporte. Las líneas 2 sur (Barcelona-Vilanova-Sant Vicenç de Calders), 7 (Martorell-L'Hospitalet de Llobregat) y 10 (Barcelona-Aeropuerto) del servicio de Cercanías de Renfe, así como el tramo de plaza de Espanya a L'Hospitalet de Ferrocarriles de la Generalitat de Cataluña (FGC), se vieron afectadas el pasado sábado por las obras del AVE, que provocaron que cediese la pared de un túnel de FGC, que se inclinó hacia la vía.
La gratuidad en estas líneas ferroviarias a partir de mañana ha sido una de las principales reclamaciones de los usuarios y de varias entidades, como ICV y el sindicato UGT, durante el día de hoy. Además, Fomento ha habilitado un teléfono gratuito de información específica (900 20 22 20) que ya está operativo para atender a los usuarios afectados.
La gratuidad de estos servicios se prolongará "mientras se mantenga la modificación temporal de los servicios ferroviarios en Barcelona", según el comunicado del Ministerio de Fomento. A los clientes que dispongan de abonos de Cercanías se les entregará un billete Devolución Xpress cada vez que usen el tren en alguna de las tres líneas directamente afectadas.
Álvarez ha reaccionado de este modo después de que los socios de los socialistas en el gobierno catalán, ERC e ICV, se hayan sumado al PP y CiU al pedir que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, dé explicaciones en el Congreso sobre el servicio de Cercanías, mientras que el PSC ha solicitado primar la seguridad sobre la fecha prevista de la llegada del AVE a Barcelona.
La interrupción del servicios en algunas líneas de Renfe y de FGC, que transportan diariamente a casi 160.000 viajeros, ha obligado a utilizar 200 autobuses para suplir a los 400 trenes anulados. El servicio de autocares puesto en marcha como alternativa a Renfe y a la línea de FGC ha registrado hoy un descenso de entre un 12 y un 16% en el primer caso, y de un 20% en el segundo, respecto a la ocupación media habitual de los trenes.
