El papa Francisco, en plena purga por los abusos y encubrimientos cometidos por el clero chileno, ha ordenado que se lleve a cabo un “proceso penal” contra representantes de la congregación de los Hermanos Maristas en el país latinoamericano. La información, avanzada ayer por El País y convirmada a EL PERIÓDICO por la Conferencia Episcopal chilena y el Vaticano, implica la abertura de un sumario ante la Congregación para la Doctrina de la Fe, el antiguo Santo Oficio vaticano.

La decisión de sentar en el banquillo a los acusados de abusos y encubrimiento en un organismo vaticano ha sido tomada directamente por el Papa y constituye una excepción a las reglas generales de la Iglesia católica, ha subrayado El Vaticano. “Se trata de una disposición extraordinaria, destinada a acoger con justicia los reclamos hechos”, ha explicado a este diario el portavoz vaticano Alessandro Gisotti, dando a entender que algunas de las personas que serán juzgadas son laicos. Algo, esto último, muy insólito, pues en el Código Canónico no existe una norma clara que sancione a los laicos adscritos a centros de enseñanza religiosa.

“En general, de hecho, la Congregación de la Doctrina de la Fe solo se ocupa de estos delitos cuando las acusaciones involucran a sacerdotes, ya sean religiosos o diocesanos”, ha agregado el portavoz. Gisotti también ha precisado que dicha medida se enmarca en las acciones que el Vaticano está llevando adelante, tras las investigaciones realizadas en Chile en los meses de febrero y mayo del año pasado, “durante las cuales emergieron acusaciones de abuso sexual a menores contra algunos Hermanos Maristas en las escuelas”.

Las víctimas ya han sido informadas de la decisión del Vaticano, ha aclarado, por su parte, la Conferencia Episcopal chilena (CECH). “Ha sido Pilar Ramírez (directora de Departamento de Prevención de Abusos del CECH) quien les ha comunicado estas noticias, por encargo del Dicasterio (ministerio) vaticano, a las personas denunciantes”, explicaron los obispos chilenos en un comunicado.

La mano dura de Francisco se produce en medio de la tormenta de escándalos de abusos y acusaciones de encubrimiento que se han conocido en los últimos años y que en la actualidad están siendo investigandos también la Justicia chilena. En el caso de los Hermanos Maristas chilenos, que recuerda los abusos de colegios maristas de Barcelona y Badalona, la Fiscalía de Chile está analizando una treintena de denuncias de víctimas, la mayoría antiguos alumnos de escuelas administradas por el grupo religioso.

Un caso, este, que involucra a varios religiosos que están siendo investigados, algunos de ellos de nacionalidad española.