Agentes de la Policía Nacional han detenido en Madrid a un hombre de nacionalidad rumana reclamado por las autoridades judiciales de su país que le acusan de vender a una compatriota menor de edad por 2.000 euros para ser explotada sexualmente. Además, según informó hoy la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil, en Estepona (Málaga) ha sido arrestado un alemán también reclamado internacionalmente por quiebra fraudulenta.

La detención en Madrid de Sandu P., de 35 años y natural de Peretu (Rumanía), fue llevada a cabo por agentes del Grupo de Localización de Fugitivos. Sandu P., que en el momento del arresto portaba documentación falsa a nombre de otro compatriota, tenía una Orden Europea de Detención y Entrega emitida por las autoridades judiciales rumanas, por un delito relativo a la prostitución e inmigración ilegal.

Según esta orden, en enero de 2002, Sandu, que formaba parte de una organización dedicada a la explotación sexual, reclutó a una menor a quien facilitó un pasaporte y una cantidad de dinero y trasladó a España para venderla posteriormente por 2.000 euros. Por otra parte, agentes del Grupo de Localización de Fugitivos y de la Comisaría de Estepona han detenido a Lars Roland H., natural de Dohna (Alemania), de 30 años, y que estaba reclamado por la Justicia de su país por obstrucción a un procedimiento de insolvencia y bancarrota grave.

Este individuo está acusado de hacerse entre 2002 y 2003 con cierta cantidad de dinero de al menos cinco sociedades anónimas alemanas sobre las que habían sido dictadas medidas de insolvencia. En agosto de 2002 constituyó su propia empresa en Marbella (Málaga) y figuró como director administrativo de otras cinco compañías mercantiles, sobre las que presentó solicitudes de insolvencia destruyendo registros de contabilidad y los balances y reteniendo todos los pagos. Los dos detenidos han pasado a disposición del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional.

Otro caso en Barcelona

Por otro lado, la tía de una menor de casi tres años de Guinea Ecuatorial, que presuntamente la vendió a una pareja de Cubelles (Barcelona), ha negado hoy dicha venta, aunque ha admitido que la entregó en adopción a la pareja para "ayudar" a la niña, dado el estado de "desnutrición" en el que se encontraba. Los Mossos d'Esquadra han confirmado hoy la detención de la mujer, P.B.L., de 45 años, que posteriormente ha quedado en libertad, y la Dirección General de Atención a la Infancia y a la Adolescencia (DGAIA) ha señalado que ha asumido la custodia de la pequeña.

En declaraciones, P.B.L. ha admitido que entregó a la niña, aunque ha asegurado que no cobró los 2.000 euros por la venta de la menor, tal y como hoy publica La Vanguardia. "No hay ninguna venta. Que busquen donde quieran y si encuentran el dinero que me lo den, porque yo lo necesito", ha declarado la tía de la menor.

P.B.L. ha dicho que su hermana, madre de la menor, le contó que el padre de la niña es "alcohólico" y no puede cuidar de sus hijos, por lo que decidió ayudar a la niña y la fue a recoger a Guinea Ecuatorial para traerla a España, donde la pasada primavera la entregó a la pareja, que ya tenía dos hijos. La mujer ha destacado el mal estado de salud de la niña, y ha asegurado que llegó con "lombrices y gusanos", desnutrida y con el "estómago sedado".

P.B.L. ha afirmado que la mujer de Cubelles le dijo que podía ayudarla y que cuidaría de la niña como si fuera "su bebé", y ha añadido que la menor está bien y que ha ido en alguna ocasión. La tía de la menor se ha mostrado muy dolida con su familia, especialmente con su madre, que fue quien la denunció a la policía catalana al sospechar que había vendido a la niña, y ha expresado su decepción porque fue ella quien trajo "del primero al último" de los miembros de su familia a España.

Mientras tanto, la DGAIA se ha hecho cargo de la tutela de la menor, que permanece en un centro de acogida, y la pareja de Cubelles se encuentra como imputada en el caso.