El rotundo descenso de muertes por accidentes de tráfico sigue batiendo récords. El pasado febrero se cerró con 135 fallecidos, lo que no solo supone una reducción del 14% con respecto al mismo periodo del año anterior, sino un hito histórico en las últimas cuatro décadas: para encontrar un balance similar es necesario retroceder al año 1965, en que se registraron 131 víctimas. En 1966 continuó el ascenso con 141 muertes.

Según datos facilitados por la Dirección General de Tráfico (DGT), teniendo en cuanta las estadísticas de febrero, el número de siniestros en la carretera se ha venido reduciendo de manera imparable en los últimos 17 meses. En los dos primeros meses del 2009 hubo 290 muertos, 46 menos que durante enero y febrero del 2008. En la presente década, se observan picos como los 307 fallecidos solo durante el mes de febrero del 2001 y los 250 del año 2005.

Los expertos en seguridad vial consideran que en el fuerte descenso de la mortalidad ha sido decisiva la reforma del Código Penal, que entró en vigor a finales del 2007 y pasó a considerar delito conductas más peligrosas al volante, como los excesos de alcohol y velocidad.

DESPROPORCION ENORME Sin embargo, los accidentes de motos siguen siendo el agujero negro de la siniestralidad vial. Los datos acumulados de los últimos cinco años relevan que este vehículo se mantiene como la gran excepción negativa al ininterrumpido descenso de las muertes en carretera.

Si entre el 2003 y el 2008 el número de fallecidos que viajaban en turismos bajó el 53%, la cifra de víctimas que iban en moto no solo no cayó, sino que aumentó un 33%. Una desproporción que se ha atenuado ligeramente. En los últimos dos meses se han producido 38 muertos, mientras que en el mismo periodo del 2008 hubo 35 fallecidos. El mayor aumento de accidentes en vehículos de dos ruedas ha sido precisamente en febrero, mes en el que se han registrado 26 fallecidos frente a los 19 que hubo en el mismo mes del 2008.

GUARDIA CIVIL MUERTO No obstante, el balance de este fin de semana, desde las tres de la tarde del viernes hasta las ocho de la noche de ayer, arrojó un total de 18 muertos, 13 heridos graves y siete heridos leves. El fin de semana registró tres heridos graves en accidentes en las carreteras extremeñas.

Entre las víctimas mortales figura un motorista de la Guardia Civil. Según informó la DGT, Carlos Escolano Colás, zaragozano de 36 años, encontró la muerte ayer "en acto de servicio" al colisionar frontalmente, por causas que se están investigando, con una furgoneta cuando se dirigía a prestar auxilio en un accidente de circulación en la localidad de Quel (La Rioja). El agente deja y mujer un hijo de 2 años de edad.