La asociación de víctimas del accidente del avión de Spanair en Barajas (Madrid) denunció ayer las "presiones" a las que fueron sometidos los familiares por parte de los bufetes cazaindemnizaciones de Estados Unidos unos días después de la tragedia, ocurrida el pasado 20 de agosto.

El presidente de la asociación, Federico Sosa, aprovechó la primera rueda de prensa, celebrada en Las Palmas de Gran Canaria, para censurar las prácticas de los abogados norteamericanos que desembarcaron en tropel en la isla con la idea de conseguir el mayor número de clientes posibles.

Sosa criticó que estos letrados ejercieran "una presión en las familias en momentos en que la capacidad de decisión no era la más adecuada". En ese sentido, reclamó "prudencia" a los familiares que se ven acosados por las ofertas de despachos de abogados que les prometen suculentas indemnizaciones si demandan a Boeing en Estados Unidos. "Por sus hechos los conocerán. Las actuaciones de determinados bufetes se definen por sí solas", advirtió.

No obstante, admitió la posibilidad de que la asociación entable acciones legales contra la constructora del avión ante los tribunales norteamericanos si el resultado de las investigaciones así lo aconsejan. "Pero el proceso penal se está sustanciando en España", recordó.

Lo que sí quiso dejar claro Federico Sosa es que la asociación nació hace mes y medio con el fin de averiguar "cómo y por qué" ocurrió el accidente, por encima de cualquier consideración de tipo económico: "El cuánto nos interesa muchísimo menos. ¿Cuánto vale la vida de una sola de las víctimas? No hay dinero en el mundo que devuelva y repare una sola de las vidas que se han perdido", lamentó el presidente de la asociación.

EL VIDEO DEL SINIESTRO En esta misma línea de apelación a la fibra sensible de los ciudadanos, pidió a los medios de comunicación que no vuelvan a repetir las imágenes del accidente del avión de Spanair para evitar sufrimientos a las familias de las víctimas. Cuando se difundió ese vídeo, según aseguró Sosa, hubo un "gran malestar" generalizado entre los allegados.

Mientras tanto, ayer continuaron las declaraciones en el juzgado con el testimonio del técnico que suministró combustible al avión MD-82 antes de despegar. Confirmó que le extrañó ver las luces anticolisión encendidas, pero que no se lo comunicó al copiloto. La asociación de técnicos de mantenimiento ya ha advertido de que esta circunstancia no tiene nada que ver con el accidente.