Ultimamente, cada vez que habla José Ignacio Wert eleva más el nivel de polémica. A pesar de las duras críticas de la comunidades, los rectores y la oposición, el ministro de Educación echó ayer más leña al fuego al tratar de justificar su propuesta de elevar a 6,5 la nota media exigida para obtener una beca universitaria. Wert cuestionó durante una entrevista en TVE que un estudiante universitario que no sea capaz de llegar a esa nota "esté bien encaminado" y deba continuar sus estudios universitarios. "Debería estar estudiando otra cosa. A los becarios no es solo que les paguemos sus estudios, es que además les pagamos por estudiar", remachó.

El ministro insistió en que el aumento de nota desde del 5,5 al 6,5 es, a su juicio, un esfuerzo "razonable" y no "una exigencia exagerada", ya que las becas no solo se conceden para que estudien quienes no tienen suficientes recursos sino que "también son un componente de política educativa, tienen una base social y se dan para que estudien". Wert enlazó así con los argumentos expuestos el pasado jueves a los rectores, a quienes anunció que no se apeará del 6,5 porque la expulsión de alumnos no supone el mismo problema que en los niveles inferiores donde la subida de la exigencia académica a un 6 podría agravar las cifras de abandono escolar. Wert en este caso se plegó ante la oposición de los consejeros del Partido Popular y dará marcha atrás.

Varias asociaciones de estudiantes replicaron indignadas pidiendo la dimisión del ministro por "cerrar las puertas de la universidad a los alumnos de las familias menos pudientes que aprueban y no alcanzan un 6,5". "El sí que está suspendido por el CIS y la mayor parte de la sociedad", subrayó el Sindicato de Estudiantes. El presidente de la Federación de Asociaciones de Estudiantes (FAEST), Fidel González, le exigió que retire sus palabras y pida disculpas a los becarios.

LLUVIA DE CRITICAS "Quiere una universidad con dos puertas, la de ricos y la de pobres", denunció Aratz Castro, portavoz de la Coordinadora de Representantes de Estudiantes de Universidades Públicas (CREUP). "Demuestra su visión elitista y clasista", coincidieron y resumieron las portavoces del PSOE, Elena Valenciano, y de ICV, Laia Ortíz. "Con el señor Wert, el alumno rico seguirá adelante con la misma nota con que un alumno con menos recursos será expulsado de la universidad", apostilló Valenciano durante la presentación de la campaña cambialalomce.

DUDAS EN EL PP Los consejeros en materia de política universitaria tendrán hoy oportunidad de pronunciarse sobre el decreto en una reunión que celebrarán con Wert. Las comunidades no gobernadas por el PP ya se han mostrado en contra. Ayer, desde Génova eludieron dejar nada claro. "Hay que esperar a ver en qué se concreta el texto", se limitó a comentar el vicesecretario de organización del PP, Carlos Floriano. "En este momento no hay nada cerrado", agregó.

Entre los consejeros que se pronunciaron está la valenciana de Educación, María José Català, defendió la vinculación de Wert de las becas al rendimiento, "pero todas las comunidades deben estar de acuerdo", matizó.