Ocurrió el pasado mes de octubre. Un radar ‘cazó’ al acusado mientras circulaba por la autovía A-5 en sentido Portugal a 201,4 kilómetros/hora, cuando la velocidad permitida en esa vía es de 120. Fue pillado concretamente por el cinemómetro que se encuentra situado en el punto kilométrico 212 de la citada carretera. El Juzgado de lo Penal Número 1 le condena ahora a pagar una multa de 1.080 euros y se le retirará el carnet un año y un día.