La oferta era atractiva: formar parte de un 'club de viajes' comprando paquetes turísticos con los mejores descuentos y, posteriormente, recibir comisiones por difundir las bondades del programa y captar nuevos clientes. Pero la Policía Nacional ha descubierto que todo era mentira, que las empresas hoteleras nunca habían oído hablar de ese club de viajes y que todo era parte del entramado piramidal de una trama que estafó a más de 15.000 personas en España, Portugal o Francia y logró estafar cerca de 12 millones de euros, según las primeras estimaciones.

La operación policial se inició en marzo del 2016 a raíz de la denuncia de una asociación de víctimas, que sumaban ya entonces 274 afectados, y se ha saldado con 14 detenidos, entre ellos los responsables de la organización con sede en Dos Hermanas (Sevilla). Pero también captadores de clientes que sucumbieron a la tentación de dinero fácil y vacaciones a cambio de la venta de paquetes turísticos y marketing en redes sociales.

SALTO AL MARKETING DIGITAL

Todo comenzó en el 2013, cuando el entramado empezó a difundir la posibilidad de formar parte de un club de viajes mediante la oferta de paquetes turísticos, consistente en descuentos en diferentes cadenas hoteleras de reconocido prestigio, cimentados en supuestos convenios y acuerdos entre el entramado y el sector hotelero que posteriormente se descubrió que eran inexistentes. La propuesta contaba supuestamente con todos los permisos y autorizaciones y garantizaba el cumplimiento de los requisitos legales.

Se trataba de un negocio multinivel donde el interesado escogía dónde asociarse, ya que podía comprar paquetes turísticos que oscilaban entre los 150 y los 5.000 euros. A partir de ese momento, esos interesados se involucraban directamente en la captación de nuevos socios, recibiendo jugosas comisiones en función del número de clientes captados y paquetes comprados. Según las investigaciones, a finales del 2004, y con la base del modelo piramidal ya asentada, los responsables de la red invitaron a esos socios a dejar de lado los paquetes turísticos e involucrarse directamente en el mundo del marketing 'on-line' mediante la oferta de paquetes publicitarios, sin dejar de lado la captación de nuevos promotores publicitarios y por tanto la posibilidad de incrementar las comisiones.

BENEFICIOS DERIVADOS DEL PRESTIGIO

La Policía detalla que el modelo que orquestó la trama se centró en una herramienta que determina la popularidad de una página web. “Para ello, se ofrecía a los clientes una manera sencilla de conseguir comisiones, dado que a través de las redes sociales debían publicitar la página web representativa del entramado mediante tres copias diarias de dicho hipervínculo”. Para los organizadores de la red, era “un plan único en el mundo empresarial”, y se defendía ante el cliente que al incrementarse ese prestigio de la web con el aumento del número de socios, las grandes compañías se interesarían por ella y ofrecerían interesantes acuerdos comerciales que reportaría beneficios para todos. Para demostrar solvencia y solidez internacional, se organizaron grandes eventos en los tres países afectados.

El sistema funcionó porque los estafadores utilizan el dinero de los nuevos clientes para pagar las comisiones prometidas a los socios más antiguos y, así, no levantar sospechas. De este modo mantuvieron la situación hasta que se hizo insostenible. Las averiguaciones realizadas por la policía permitieron conocer que diez empresas integraban el entramado y contaban con más de 15.000 socios, a quienes se animaba a participar activamente en la captación de nuevos clientes. Sin embargo, sus únicos ingresos provenían de la compra de los diferentes paquetes promocionales y turísticos, así como de las cuotas de socio. Además, los agentes detectaron grandes movimientos de dinero entre esas empresas del entramado, que embolsó nada menos que 28 millones de euros en el 2015.