Agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Subsector de Tráfico de la Comandancia de Cáceres detectaron a seis conductores con una tasa de alcohol superior a la permitida, durante los controles realizados el pasado fin de semana en distintos puntos de la provincia cacereña. Estas personas no solo serán denunciadas, sino investigadas por un delito contra la seguridad vial, ya que superaron ampliamente la tasa máxima permitida. La Guardia Civil recuerda que podían haber ocasionado graves riesgos a los demás usuarios de la vía.
El primer conductor fue localizado gracias a la colaboración ciudadana, que alertó a una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico en las proximidades de Plasencia, al observar un vehículo que circulaba de forma anómala. Tras ser localizado arrojó resultado positivo en la prueba de alcoholemia.
La segunda de las actuaciones tuvo lugar en las cercanías de la población cacereña de Pozuelo de Zarzón. Fue localizado el conductor de un vehículo que mostraba graves síntomas de haber consumido bebidas alcohólicas, dando resultado positivo en el test.
Por otro lado, en una vía de comunicación próxima a la población de Moraleja, la Guardia Civil identificó al conductor de un vehículo, de nacionalidad portuguesa, el cual se negó a realizar la correspondiente prueba de alcoholemia, siendo investigado como supuesto autor de un delito de desobediencia y otro de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas. Igualmente, y en el mismo punto, se dio la circunstancia que durante la noche se localizaron otros dos conductores que arrojaron resultado positivo, superando las tasas establecidas para la conducción de vehículos.
La última de las actuaciones tuvo lugar en una vía de comunicación próxima a Villamiel (Cáceres), donde se produjo un accidente, al salirse un vehículo de la calzada. La conductora resulto ilesa pero presentaba a simple vista sintomatología etílica, arrojando resultado positivo tras la realización de la correspondiente prueba de detección de alcohol.
Todos ellos, fueron investigados por delitos contra la seguridad vial, y se dio cuenta a la Autoridad Judicial.
La Guardia Civil recuerda que conducir bajo los efectos de bebidas alcohólicas, además de
poder suponer un delito contra la seguridad vial, merma considerablemente las actitudes, y por ende, aumenta el riesgo de sufrir un accidente de circulación, y lo que es peor, implicar a otros conductores que circulan respetando todas las normas.
