Tragedia en el Guadiana a su paso por Badajoz. Tres trabajadores pertenecientes a una de las empresas contratadas por la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) para las labores de contención y supervisión del camalote han fallecido esta mañana tras volcar su barca en el azud de La Pesquera. Se trata de José Luis Martín Quintana, de 31 años, Rafael Gemio Estévez, de 44, y Emilio Bastida Vaca, de 60. Los dos primeros residían en Badajoz, aunque el segundo era natural de Montijo, mientras que el tercero era de Novelda y vivía en Pueblonuevo del Guadiana.

El accidente se ha producido sobre las 8.40 horas, cuando, por causas que aún se investigan, la barca en la que se desplazaban ha sido arrastrada hasta el azud, volcando y precipitándose por sus dos metros de altura. Se baraja la hipótesis de que la embarcación haya entrado en un remolino y no haya podido salvar el arrastre del agua, lo que habría hecho que perdieran el control y volcasen, según ha apuntado la delegada del Gobierno, Yolanda García Seco.

En principio, según ha señalado, se cumplían las medidas de seguridad, pues iban provistos de los trajes y chalecos reglamentarios, aunque será la investigación la que determine los motivos y circunstancias en las que se ha producido el suceso.

El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, del que depende la CHG, ha informado a través de un comunicado, en el que ha trasladado sus condolencias y se ha puesto a disposición de los familiares de las víctimas, de que el accidente ha ocurrido cuando los trabajadores pretendía cruzar con la barca a la orilla derecha del río, así como de que el organismo de cuenca va a iniciar un expediente informativo con el fin de aclarar las causas que lo han motivado.

Los cuerpos sin vida sin vida de dos de los fallecidos fueron recuperados por sus propios compañeros en la zona de El Pico poco después del suceso, mientras que el del tercer trabajador fue arrastrado por la corriente y no pudo ser rescatado hasta casi tres horas después bajo el puente de Palmas. Los bomberos trataron de localizarlo inicialmente en el lugar del accidente, donde la barca quedó boca abajo dando vueltas. La fuerza del agua era tal que fue imposible llevarla a tierra firme, pues incluso llegó a doblar uno de los anclajes con la que la engancharon.

Equipos de emergencias desplegados en la zona. / SANTI GARCÍA

La posibilidad de que el trabajador se encontrase bajo la embarcación se descartó después de que una vecina de San Fernando diera la voz de alarma tras ver un cuerpo flotando bajo el puente de Palmas. «He empezado a dar voces para que avisaran a la policía. Lo he visto durante unos minutos aparecer y desaparecer en el agua y, de repente, se ha hundido», ha contado a este diario.

Desde ese momento, las labores de búsqueda, a las que se sumó el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (Geas), se centraron en esa zona, aunque también otra embarcación revisó el tramo hasta el puente de la Universidad e incluso varios agentes se desplazaron hasta el azud de La Granadilla. A las 11.35 minutos, los Geas hallaron en una de sus inmersiones el cuerpo del tercer trabajador, justo en la zona donde la vecina lo había visto. El agua que entró en su vadeador (mono de neopreno) hizo que su cuerpo se quedase en el fondo y no saliera a la superficie.

Los tres trabajadores eran empleados de Foresa, una de las empresas que la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) tiene contratadas para las labores de control de especies invasoras en el Guadiana. Llevaban trabajando 18 meses con esta contrata, pero ya antes habían desempeñado los mismos trabajos para otras, por lo que tenían «mucha experiencia», según han coincidido los compañeros de los fallecidos, el ministerio y la delegada del Gobierno, que se ha desplazado hasta el río junto al presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara.

En el amplio despliegue de rescate también han participado las policías local y nacional, cuya Brigada Judicial se ha hecho cargo de la investigación.

Los Geas se incorporan a la búsqueda. / SANTI GARCÍA

El pleno del Ayuntamiento de Badajoz ha guardado un minuto de silencio en señal de duelo y los sindicatos UGT y CCOO han remitido sendos comunicados para mostrar sus condolencias y reclamar una investigación urgente de lo sucedido por parte de la Inspección de Trabajo.

«No nos cabe en la cabeza cómo ha podido pasar»

«Si nos dijeran que no conocían el río, pero lo conocían muy bien. No nos cabe en la cabeza cómo ha podido pasar». Los compañeros de Emilio, Rafael y José Luis no encuentran explicación a la tragedia, lo que los sume aún más en el desconsuelo. Los tres componían una de las brigadas desplegadas por el río (la CHG cuenta con un dispositivo formado por cien personas) y la última vez que los vieron con vida fue a las siete y media de la mañana, hora a la que salen cada día hacia su destino desde la base, en la que se vuelven a reencontrar a las 15.30 horas cuando recogen las barcas. «Estamos destrozados, llevamos mucho tiempo trabajando juntos y somos una piña», ha contado emocionado uno de ellos. «Eran muy trabajadores, buenos compañeros y personas», ha destacado. Desde que están trabajando, según ha asegurado, nunca han sufrido un incidente grave.

Equipo de búsqueda en el Guadiana. / SANTI GARCÍA