--El Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida ha recibido el premio Turismo Extremadura de el Periódico Extremadura, diario de Grupo Zeta. ¿Qué significa para usted este reconocimiento?

--Todos los reconocimientos son bienvenidos y creo que éste es importante porque se trata de la primera edición de estos premios. Ser galardonado por el Periódico Extremadura es muy importante, tanto para el equipo como para mí. Es un honor haberlo recibido y disfrutado de una tarde tan estupenda en Mérida.

--El público sigue siendo para usted soberano. ¿Realmente es quien decide lo que quiere ver? ¿Y usted cómo lo sabe?

--Observo al público. Lo sondeo. Y después tomo decisiones. Sobre esa base procuro hacer la programación. Mi criterio es que el festival cada año tenga algo distinto de las últimas ediciones, propuestas diferentes en títulos, actores y directores. Si se analiza la programación que he hecho en los últimos cinco años puede verse que hay grandes obras y que este año he hecho una apuesta por títulos que nunca se han representado en el Festival de Teatro Clásico de Mérida. Eso sí, siempre de temática grecolatina.

--¿Cómo ha conseguido que funcione tan bien el binomio cultura-turismo?

--Porque están muy relacionados ambos conceptos. Este festival se desarrolla en las fechas del esplendor del turismo en España. En una región donde no hay playa la combinación cultura-turismo va estupendamente, porque la gente quiere disfrutar por las noches. Hay dos meses de programación en el Teatro Romano y en otras extensiones que tiene el festival, donde el binomio cultura-turismo funciona.

--Esta edición, la quinta consecutiva que dirige Jesús Cimarro tras la adjudicación de la gestión por contrato público a Pentación Espectáculos el pasado mes de marzo. Parece que tras años de desconcierto se ha encontrado la fórmula ideal entre lo público y lo privado ¿Cuál es?

--La fórmula ideal no existe. Estamos experimentando en materia cultural este modelo, que, de momento, está funcionando. Siempre he abogado por la colaboración público-privada, y en cultura mucho más. Los datos lo demuestran. Yo cogí el festival con 52.500 espectadores y el año pasado hubo 158.302. Hemos triplicado la cifra de espectadores. Eso se une a que hay muchos que vienen de fuera de Extremadura y come y duerme en la región. Y eso son ingresos para la economía de la comunidad.

--Este año la programación cuenta con figuras del teatro, la música o la danza nacional como Paloma San Basilio, Verónica Forqué, Toni Cantó, Estrella Morente, Aída Gómez, Antonio Canales, Ara Malikian, Aitor Luna, Daniel Muriel, Armando del Río, entre muchos otros. ¿Qué destaca de la programación?

--La variedad y que está pensada para todos los públicos. Había gente que me pedía espectáculos de flamenco. Otros música, danza- Y hay de todo este año. Hemos intentado que esté todo lo que le apetece al público. La visión que tengo de un festival público es que tiene que cubrir al máximo posible de la población.

--¿Cuál es la obra soñada que le gustaría producir para el festival?

--Hay muchas cosas, pero no las diré. Trataré de hacerlas y presentarlas en su momento.

--¿Cuánto hay de corazón y cuánto de empresario en un productor de teatro en España?

--Intento que sea al cincuenta por ciento. Me gusta mantener los equilibrios.