Ya es una conocida influencer con varios miles de seguidores -exactamente, 378.000-, pero ahora Anna Ferrer acaba de dar un importante salto en su carrera profesional. La hija de Paz Padilla ha debutado como presentadora de televisión en MorninGlory, un programa de MTMAD y la apuesta más joven de Mediaset. El espacio, que se emite todos los viernes a las 10 de la mañana, cambia de presentador cada cuatro programas y, en esta ocasión, le ha tocado el turno a Anna, quien ha decidido adoptar el apellido de su progenitora para esta nueva aventura.

Un tanto nerviosa, pero ante todo muy natural y divertida en su debut ante las cámaras, la joven de 22 años quiso hablar sobre diversos aspectos de su vida para que la audiencia pudiera conocerla un poco mejor. Además, quiso que sus fans contaran con un protagonismo especial al contestar algunas de las preguntas que le enviaron, entre ellas si aceptaría entrar a algún reality, a lo que respondió que, de momento, no. A pesar de que acaba de graduarse en económicas, Anna no quiere cerrarse puertas en una profesión con la que está muy familiarizada.