--¿Cómo se siente por el éxito alcanzado?

--Siento orgullo y satisfacción. El trabajo parece que sale bien, está bien hecho y es bien acogido por nuestro público. Significa que no hemos cometido torpezas, en las que es tan fácil caer en esta profesión. No se trata solo de llegar, sino de seguir con la misma constancia e ilusión y plantearse el trabajo de cada día como una nueva aventura.

--¿Qué significan las cifras de audiencia para un noticiario?

--A la hora de la competencia, la audiencia es un baremo extraordinariamente atractivo. Es de las pocas cuestiones objetivas que se pueden analizar, y hay que darle la importancia que tiene. Con la cantidad de ofertas que hay en nuestra televisión, los informativos tienen cada vez una mayor importancia en el cómputo global de telespectadores. Aparte de eso, también puede derivarse un cierto prestigio, que proporciona solidez y notoriedad a la cadena.

--¿Qué informaciones atraen más a los telespectadores?

--Depende. En algunas jornadas hay noticias de marcado corte político que pueden tener una audiencia extraordinaria, aunque no es lo habitual. Normalmente, lo más impactante ahora son las informaciones de mayor carácter social y, sobre todo, las nacionales. A veces, también los deportes funcionan bien.

--¿Han cambiado mucho los informativos en los últimos años?

--Sí. Los que yo hacía hace 30 años no se parecían demasiado a los de hoy. Estaban más cargados de política e información internacional, y de mucha menos crónica de carácter social. En general, los noticiarios de ahora son más entretenidos. Los de antes también eran más cortos.

--¿Qué papel juega el presentador en ellos?

--De manera egoísta, podría decir que es muy importante, pero como no estoy acostumbrado a mentir creo que el papel fundamental de este espacio es el equipo. La base es hacer un buen informativo que pueda ser seguido por todo tipo de telespectadores y buscar cada día el tema más importante relacionado con la vida cotidiana.

--¿Cómo lleva su vuelta a la información deportiva a través de la Champions?

--Menos mal que no tengo que correr por el campo, porque enseguida me habrían salido agujetas. Nunca he abandonado el deporte, que siempre me ha atraído, y conozco los avatares de los equipos, por lo que me siento cómodo. A la gente igual le ha producido un pequeño shock verme ahí, pero creo que muchos todavía tienen presente mi actividad en anteriores espacios deportivos. Los espectadores pueden advertir que no me supone un esfuerzo estar al lado de mis compañeros. Además, el producto es el mejor en el que se puede participar, porque la Liga de Campeones es el no va más.