El modo en que TVE ofreció la información sobre la autoría del 11-M ha sido calificado como una manipulación clara por parte de los expertos en comunicación consultados por este diario. Para Román Gubern, catedrático de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), fue "un escándalo" el planteamiento informativo, al intentar "influir para que todos creyésemos que había sido ETA la culpable, cuando la misma mañana del jueves ya había hipótesis que apuntaban a Al Qaeda, y que difundieron las principales cadenas de noticias del mundo".

Gubern consideró que la televisión pública practicó "una permanente manipulación insidiosa que fortalecía el voto de mano dura y a por ellos", lo que es una consecuencia de la manera en que han funcionado los informativos en los últimos tiempos. "La tele pública siempre está al servicio de quien manda, pero desde la democracia nunca ha estado tan manipulada por el Gobierno".

"UN BUMERAN"

Ese control férreo de la información, no obstante, puede conducir a una especie de sobredosis de manipulación, "que es cuando se convierte en un bumerán que se vuelve contra el que lo lanza y hace que el tejido social reaccione". Esta puede ser una explicación del voto de muchos ciudadanos el domingo.

Carles Ruiz, profesor de Etica profesional de la Universidad Ramon Llull, tilda la actuación del PP de "crimen político. Han atacado la esencia de la democracia, que es la libre circulación de ideas para así impedir que haya contradicciones". Ruiz, que acaba de publicar el estudio Etica de la audiencia , se hace la pregunta que resume la actuación de TVE y el Gobierno: "¿Cómo se puede mantener al frente de los informativos a Alfredo Urdaci, quien está condenado por manipulación?".