Licenciada en Empresariales y políglota (habla italiano, francés, inglés e incluso japonés), Valérie Tasso fue prostituta de lujo durante cinco meses. Pero la plasmación en negro sobre blanco de sus experiencias en este corto periodo de su vida le ha dado fama y dinero (su libro Diario de una ninfómana va por la 15 edición). Y un prestigio que le permite hablar de sexo en radio (La ventana , de Gemma Nierga, en la cadena SER) y en la televisión catalana.
--¿Qué opina de Dos rombos?
--Me aburre, pese a la espontaneidad y frescura de Lorena Berdún. Comprendo que TVE exija explicaciones de sexo técnicas, y no tanto lúdicas, pero yo lo entiendo como un placer.
--¿Haría un programa de sexo?
--Sí, pero me temo que me lo censurarían a los dos días. Haría un programa de sexo con glamour y tocando temas originales. Por ejemplo, perversiones insólitas. En el sexo todo es positivo, si no se le hace daño al otro... Y añadiría gotas de humor.
--¿Le han tentado otras cadenas?
--Me persiguen, pero no iré a determinados programas donde sí que abunda la pornografía televisiva: Aquí hay tomate, El diario de Patricia...
--Pero sí fue a TNT, en Tele 5.
--Jordi González fue mi descubridor y me encuentro a gusto en sus programas. En TNT hablé de la prostitución de modelos y presentadoras de televisión...; y es cierto que hay presentadoras que se prostituyen porque sus ingresos son irregulares y quieren tener un mejor nivel de vida. Pero yo no lo condeno, como tampoco a los clientes que, por morbo, acuden a estas mujeres.
--¿Iría a Crónicas marcianas?
--Me han invitado más de una vez, pero iré con la condición de alternar en la mesa de colaboradores. Es que se me comerían, porque no sé gritar. Y eso que el primer año de Crónicas... lo seguía a diario.
--¿Le gustaba más la etapa de Crónicas... sin Boris Izaguirre?
--A pesar de lo que se le critica, Boris no está desprestigiado. En sus muchos años en Crónicas... no se ha quemado. A veces dice algo que nadie ha mencionado antes, y nunca le he visto caer en la ordinariez.
--¿Usted se definiría como liberal y promiscua?
--Liberal sí, promiscua, no, porque no me como un rosco.
--Será que los hombres le tienen miedo...
--Es cierto, y, en general, cada vez tienen más miedo a las mujeres. La autoestima masculina está por los suelos. Y que conste que no soy feminista: considero que no liberan a la mujer, sino que la alienan...
--¿Su presencia en los medios de comunicación va a ir a más?
--Sí, pero no quiero quemarme; prefiero ir poco a poco. No soy partidaria de los booms de un solo día. Estoy teniendo una buena acogida..., dicen que mi acento francés me ayuda a tener más gracia al hablar.
