Hoy lo suyo sería seguir hablando de las autopsias necrófilas, porque también sobre la tumba de Imperio Argentina hay cuervos que escarban con el pico. El sábado, por ejemplo, Salsa rosa (Telecinco) enfrentó a Sandra, nieta de Imperio, y Jesús Porras, compañero de su otra nieta Teresa. Le decía él: "¡Sinvergüenza!" Y ella contestaba: "Estafador. Chulo de mierda". ¡Ah! gran combate para hacerse con los restos del imperio. Pero no vamos ahora a pormenorizar la velada porque el cubo de la basura de casa está ya bastante a rebosar, y más no cabe. Hablemos de estampas más alegres. El debut del joven actor Juan José Ballesta en la serie Paraíso (La Primera de Televisión Española), el otro día, sin ir más lejos. Tenemos de este muchacho un grato recuerdo. Lo descubrimos cuando interpretó a Pablo, alias El Bola , en la película homónima de Achero Mañas. Cosechó un éxito enorme. Pero no sabemos si Juan José Ballesta ha sido informado de que pasar del cine a la televisión es como bajar una escalera. En el caso de Paraíso , es bajarla de golpe: le hacen interpretar a un gamberro y les ha salido Jaimito en la república de los cocos. De modo que este capítulo no se ha salvado por Ballesta. En todo caso se ha redimido un poco gracias al fenomenal Manuel Manquiña, que hacía de mago mentalista y estaba estupendo. Es de suponer que al joven Ballesta esta incursión en la publicitaria teleserie le habrá servido para distinguir entre el arte de lo culinario y lo puramente alimenticio. O sea, entre la gastronomía cinematográfica y el fast-food televisivo.

La generala. -- El pasado viernes, en el concurso La quinta esfera (Telecinco), dieron por bueno que la generala es la mujer del general. Ojo. Aunque el diccionario lo contempla, se advierte que sólo es admisible como forma coloquial. Naturalmente. De lo contrario resultaría que Ana Botella sería presidenta del Gobierno, y Marta Ferrusola presidenta de la Generalitat. Y no lo son. Al menos oficialmente.