La noche temática estrena mañana (23.35, La 2) el documental en dos partes La Cosa Nostra sobre dos organizaciones que hicieron del crimen una leyenda: la mafia italoamericana, heredera a su vez de la la mafia siciliana, dos modelos a seguir por criminales en todo el mundo.

En La Cosa Nostra (1ª parte) viajamos hasta 1871, tras la unificación de Italia. Impulsados por la miseria, cuatro millones de italianos, muchos dedicados a la delincuencia, deciden emigrar a Estados Unidos. Allí necesitan mano de obra. A principios del siglo XX, Nueva York se convirtió en la ciudad italiana más grande del mundo. En este contexto se desarrolló una nueva organización: The Black Hand, «la mano negra». Su actividad principal era la extorsión a sus propios compatriotas. Estados Unidos acaba de introducir la prohibición, la ley seca, y ha creado un mercado que resultará muy fructífero para los criminales italianos.

Es el comienzo de una guerra sangrienta que provoca centenares de muertes en las calles de Nueva York. La segunda parte del documental, que se emite a continuación, retoma la acción en la década de 1970: EEUU es un país devastado por las drogas. El presidente Richard Nixon declara la guerra a esa epidemia.

Los laboratorios están en Palermo, bajo el control de la mafia. En la lucha contra el narcotráfico, el FBI pone en marcha la Operación Pizza Connection.